Laura suele quedar con sus amigas los viernes por la noche en un bar cerca de la Rambla del Raval. Se han enviado 32 whatsapps para concretar la hora ya que Lidia tenía una entrevista de trabajo después de 8 meses en paro, Pilu tenía una entrevista con la profe de danza de su hija y Cristina está missing por problemas personales. Como Laura es de buenas costumbres, ha preferido ir antes aunque se tuviera que esperar sola. Cuál ha sido la sorpresa cuando ha visto entrar a una chica muy atractiva que ha visto en el Tinder con un vestido de flores y una sonrisa de oreja a oreja…
En el terreno de las relaciones afectivas y sexualidad, la habilidad para saber despertar el interés de la persona que le gusta a Laura es clave. Por otra parte, el miedo al fracaso y al rechazo suelen ser uno de los principales obstáculos a la hora de acercarse a la persona que despierta su propio interés.
Factores como un buen autoconcepto, autoestima y seguridad facilitan esta habilidad de seducir.
Cuando la necesidad de aprobación y de agradar a los demás está muy presente, esto dificulta sentirse competente en materia de seducción ya que tener habilidades de seducción no significa ni mucho menos agradar o atraer a todo el mundo. Las nuevas tecnologías han propiciado que estas habilidades se desarrollen en un contacto a través de la pantalla gracias a aplicaciones específicas para ligar, chats o redes sociales y, por otra parte, han disminuido las habilidades en el contacto en directo a través de la mirada, el contacto con los sentidos, la voz, la distancia corporal, la sonrisa, etc. ¿Qué puede hacer Laura en una situación como ésta para acercarse a ella? Te propongo un ejercicio, piensa en tu capacidad de ligar e identifica qué características forman parte de tu personalidad más seductora y cuáles consideras que podrían mejorar:
- Capacidad para tener iniciativa
- Crear una ocasión en vez de confiar en el azar
- Disposición a conocer gente nueva
- Vivencia de la seducción como un juego, no como un examen
- Habilidades asertivas para poner límites
- Buena autoestima y confianza en sí misma
Estar en conexión permanentemente con los propios sentidos como el gusto, el olfato, el oído, el tacto y la vista es muy beneficioso a la hora de despertar los sentidos de otra persona.
Si alguien tiene la creencia de que, en definitiva, saber ligar es sólo una cuestión de belleza, de altura o de peso, es importante no creérselo. También es importante recordar que seducir no es manipular a nadie ya que una persona con una buena autoestima es capaz de aceptar el no y no pone a prueba su valía personal para que no coincida con el gusto, atracción o deseo de otra persona . La seducción, la capacidad de despertar los sentidos de los demás y saber ligar es más una actitud despierta y válida en otros ámbitos de la vida como seducir en una entrevista de trabajo, defender una opinión en una cena o conocer nuevas amistades.
Vemos, pues, cómo acaba la historia de Laura:
…. la sonrisa de Laura también apareció en su cara y, por eso, esperó unos minutos antes de decidir qué hacer ya que la chica que había entrado por el bar donde estaba, estaba sola en una mesa muy cerca de ella y no sabía si había quedado con otra persona. Estaba mirando el móvil y, en una ocasión, le soltó una mirada sugerente. Entonces, decidió acercarse sin esperar nada, simplemente darse la oportunidad de conocer a alguien que le parecía muy interesante. “Hola, ¿cómo estás? No he podido dejar de mirarte todo el rato…” le espetó observando su reacción inicial al pronunciar estas primeras palabras.
Daniel Borrell, psicólogo col. 12.866, terapeuta sexual y de pareja