Violencia sexual contra las mujeres y las niñas

QUÉ DICEN LOS DATOS

Cada día se denuncian en España 8 violaciones, según datos del Ministerio del Interior del año 2023. Respecto al 2022 supone un incremento del 12% y esta tendencia al alza es constante en los últimos años. También se incrementa la tendencia a que las violaciones se lleven a cabo por dos o más agresores. En 2023, 2.867 adultos fueron condenados por delitos contra la libertad sexual, un 10,5% menos que en el año anterior, según los datos del Instituto Nacional de Estadística. Estos adultos cometieron 3.4658 delitos, que se calificaron de la siguiente manera: 839 como abuso y agresión sexual, 996 como abuso sexual, 646 como agresión sexual de las que 30 fueron consideradas violaciones.

Llama la atención que mientras suben las denuncias, bajan las sentencias condenatorias, y el escaso número de éstas que son consideradas violaciones. Pero de qué extrañarse me pregunto, mientras leo la noticia de que la sentencia no envía a prisión a ninguno de los 7 empresarios que pagaron a una red de explotación sexual de menores.

En la Macro encuesta de violencia contra la mujer llevada a cabo en 2015, realizada por el Ministerio de Sanidad, Servicios sociales e Igualdad del gobierno de España se ofrecen datos de las víctimas que sufren las diversas formas de violencia que existen (violencia psicológica, sexual, física, económica,…) a manos de su pareja o ex pareja. En esta investigación, que contó con una muestra de 10.171 mujeres de 16 años en adelante, se conocieron los siguientes apuntes: Un 8,1% de las residentes en España había sufrido abusos sexuales en algún momento de su vida, y de éstas, un 94% reconoció que no fue una agresión aislada en el tiempo, sino que pasó de forma reiterada. En los últimos 12 meses, un 1,4% de las mujeres entrevistadas fueron víctimas de violencia sexual, un 88,6% de las cuales fue un abuso que se repitió a lo largo de los meses.

Numerosos estudios muestran vínculos consistentes entre el uso de pornografía y una mayor cosificación sexual y creencias más estereotipadas sobre los roles de género. Muchos jóvenes creen que el porno es fiel a la sexualidad real y para 1 de cada 3 es su única fuente de información afectivosexual.

LAS CONSECUENCIAS DE LA VIOLENCIA SEXUAL

Una de las conclusiones más compartidas entre los estudios es que las mujeres que han sufrido una agresión sexual tienen más posibilidades de desarrollar Trastorno de Estrés Post-Traumático (TEPT) y síntomas depresivos y ansiosos. En cuanto al TEPT un estudio (1) en el que la muestra eran 317 personas que habían sufrido una agresión sexual, apuntaba que el 39% había sufrido TEPT en los 6 meses de duración del estudio, además puntualizaba que había más riesgo si habían sufrido la agresión por más a una persona o si habían sufrido heridas en el proceso.

Pese al alto porcentaje de mujeres que padecen una agresión sexual, sólo el 60% acuden en busca de ayuda, mientras que alrededor del 40% rechazan recibir algún tipo de atención y prefieren hacer frente a la situación por ellas mismas (generar estrategias de afrontamiento o intentar olvidar lo ocurrido) (2). Estos datos se entienden mejor si vemos la película Soy Nevenka de Iciar Bollain, o la obra de teatro La Jauría de Jordi Casanovas. Tanto la película como la obra de teatro se basan en hechos reales ampliamente conocidos por todos, y que se producen con 30 años de diferencia. Ambas producciones reflejan cómo el sistema judicial y el sistema social tratan a las víctimas, lo que implica que, aunque las sentencias son condenatorias, las dos víctimas deben abandonar su vida y marcharse, añadiendo todo el proceso de duelo que implica este cambio vital. La organización social todavía penaliza a las víctimas de las agresiones sexuales y promociona el silencio -tiene menos coste social callar. La esperanza es que trabajemos para que la vergüenza cambie de bando.

1

Tiihonen Möller A, Bäckström T, Söndergaard H, Helström L. Identifying Risk Factors for PTSD in Women Seeking Medical Help after Rape. PLoS ONE [Internet]. 2014 [cited 11 December 2017]; 9 (10). Available from: https://goo.gl/NJfvQ

 2

Amstadter A, McCauley J, Ruggiero K, Resnick H, Kilpatrick D. Service Utilization and Help Seeking in a National Sample of Female Rape Victims. Psychiatric Services [Internet]. 2008 [cited 12 December 2017]; 59 (12):14501457. Available from: https://goo.gl/HrME9J 

Soledad Calle Fernández

Psicóloga General Sanitaria