En el artículo anterior escribí una introducción sobre qué son los juegos de poder, en qué consisten y algunos tipos de juegos según la descripción de Claude Steiner. Si quieres, puedes leerlo aquí.
Describiré aquí algunas de las distintas maniobras de poder a nivel psicológico. ¿Pero antes recordamos qué es un juego poder? es un intento consciente de controlar a otra persona, ya sea que el otro haga algo que no quiere hacer, o evitar que la otra persona haga algo que desea hacer.
Juegos de poder psicológicos
El objetivo de los juegos psicológicos es superar la resistencia de otra persona sin utilizar medios físicos, se puede conseguir persuadiendo, seduciendo, haciendo sentir culpable al otro, amenazante, etc.
Claude Steiner diferencia lo que él llama cuatro familias de juegos de poder psicológicos, ya sean groseros o sutiles, describiré aquí a las dos primeras familias.
- Todo o nada, juegos de poder de la escasez
- Juegos de poder de la intimidación
- Juegos de poder de las mentiras
- Juegos de poder pasivos
1. Todo o nada: juegos de poder basados en la escasez
Estos juegos aprovechan el miedo de las personas a la escasez, a ser privadas de algo que necesitan, se utilizan en diferentes ámbitos, conyugal (maridos y esposas), laboral (trabajadores y jefes), familiar (padres e hijos) y en las corporaciones.
Ámame o déjame: es un método usado para obtener seguridad, bajo la amenaza de dejar la relación si no se obtiene un compromiso por parte del otro, creando la escasez de calidad y sexualidad. O en personas que quieren sexo y amenazan con abandonar su presencia física y apoyo si no se logra ese objetivo.
Lo coges o lo dejas: el mensaje que se da en este caso es ahora o nunca, estás conmigo o contra mí. También es un recurso que se utiliza en distintos ámbitos como el conyugal, laboral, etc.
La escasez de caricias: la economía de caricias: Eric Berne definió el término caricias en el análisis transaccional como la unidad de reconocimiento social. Hay dos modos de caricias: la caricia positiva como unidad de cariño o amor y la caricia negativa como unidad de aversión humana u odio.
El suministro de caricias positivas podría estar al alcance de todos y ser ilimitado, pero no es así por una economía artificial de caricias que reduce su disponibilidad.
Entonces podemos entender que haya también una hambruna de caricias al no tener el reconocimiento y amor que se necesita. De este modo también aparece el miedo a la escasez de caricias y esto genera una avaricia de caricias. En las personas que siempre quieren tener la razón, lo que realmente existe es una necesidad de ser validadas o aprobadas o, dicho de otro modo, una necesidad de caricias.
Salvar la cara: es un aspecto de la necesidad de tener razón, se sostiene un error aunque éste sea evidente.
2. Juegos de poder de la Intimidación
A nivel psicológico estos juegos manipulan el miedo a la violencia emocional como ser denigrado/a, insultado/a, humillado/a o criticado/a.
Metáforas: son formas lingüísticas que se utilizan para afirmar o describir sentimientos positivos o negativos, pero cuando se está enfadado o cuando se quiere manipular a otro, las metáforas se utilizan para intimidar. Decir por ejemplo: si haces esto ‘me partirás el corazón’ o ‘me has dado una puñalada por la espalda’ seguramente hará sentir culpable a la otra persona, o entrará en dudas sobre si sus acciones son o no correctas.
Metáforas políticas y propaganda: las campañas políticas utilizan estos juegos en los eslóganes, o en imágenes utilizadas para desacreditar a individuos o grupos.
Tapapensamientos: se utilizan con el objeto de controlar la conversación y hacer perder el hilo del pensamiento de la víctima, por ejemplo: interrumpir, hablar rápido, elevar el tono de voz, gesticular (en algunos casos de forma amenazante), gritar y /o utilizar insultos o palabras fuertes.
¿Estás bromeando, verdad?: consiste en hacer sentir culpable a la otra persona respecto a su intención de hacer algo determinado. En este juego se finge estar asombrado y no poder creer lo que se escucha.
Juegos de poder basados en la lógica: se confunde a la otra persona utilizando el método de la lógica que en sí mismo es una herramienta para la búsqueda de la verdad, haciendo creer al otro/a que la conclusión es verdad.
Si no puedes probarlo, no: en este juego de poder se desacreditan las fuentes o premisas de alguien. Se utiliza el lenguaje de la lógica haciendo parecer que el argumento es válido y refutando la posición de la otra persona.
Desacreditar las fuentes: se invalida del punto de vista de alguien restante crédito a las premisas sobre las que se sustenta su posición. De esta forma es inválida la argumentación.
Redefinición: en este juego de poder existe una negación a continuar con las premisas controladoras de la otra persona, es decir que se cambian las premisas, se redefinen y se sigue con la conversación. Quien define las premisas posiblemente pueda controlar el resultado.
Foco de poder, intimidación física sutil: estos juegos de poder tienen que ver con cuestiones físicas como la vestimenta, o el lugar que se ocupa en una sala u oficina para causar una mayor apariencia y más intimidación. Por ejemplo: ubicarse físicamente por encima de otros, o ir acompañado de gente que le dará protección y ayuda.
Los juegos de poder de la intimidación son efectivos porque incitan a la obediencia y estimulan la culpa, en la medida en que el poder se hace más evidente, más aumenta la explotación del miedo a la violencia. En el siguiente artículo describiré a las otras dos familias de juegos de poder. El autor de El otro lado del poder plantea cuatro formas de responder a estos juegos, de los que hablaré también.
Laura López Galarza
Psicóloga Sanitaria. Terapeuta EMDR
Bibliografía:
- Berna, Eric. Juegos en los que participamos, la psicología de las relaciones humanas. Ed. Grove Press, 1964.
- Steiner, Claude. El otro lado del poder, el análisis transaccional del poder personal. Ed. Jeder libros. Sevilla, 2010.
